2.- Gracias, abuela. Gracias, tía.

 ¡Hola de nuevo, gente! 

Hay varias cosas en esta vida que me entusiasman. Dos de ellas, como ya sabréis si habéis leído mi entrada anterior, son el inglés y dar clase. Pero hay algo que no sabéis de mi. 

El otro día vi en un vídeo que todo el mundo debería tener 5 hobbies: uno que te mantenga creativo, otro que te mantenga en forma, otro que mantenga tu mente en paz, otro que te de dinero y otro que aumente tu conocimiento. El hobbie del que vengo a hablaros en esta entrada reúne dos requisitos y medio de esos cinco (no está mal, ¿no?). Principalmente, me mantiene creativa, pero también mantiene mi mente en paz y en ocasiones me ha dado dinero. No es un hobbie demasiado común. Al menos, yo no he encontrado aún a nadie (de mi edad) a quien le apasione hacer lo que yo hago. Recalco, de mi edad. Para daros alguna pista más, os diré que esta entrada se la dedico a mi abuela y a mi tía. 

Me gusta hacer punto de cruz, me encanta, me apasiona. Y esto se lo debo a mi tía, costurera, y a mi abuela, con quien comparto hobbie. No sé en qué momento empecé, ni cómo. Solo sé que ahora es mi pasatiempos favorito. Lo que más me gusta de hacer punto de cruz es recrear fotos de personas especiales, coserlas a punto de cruz y regalárselo. Creo que no hay más que añadir. Una imagen dice más que mil palabras. ¡Espero que os guste!

Un saludo, queridos lectores/as. See you soon!





Comentarios

  1. ¡Qué fuerte, tía! A ver cuando me haces un retrato a punto. Un saludito.

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  2. Algún día te contaré, Claudia, que hace muchos años me enseñaron a coser y a hacer punto de cruz, servidor, que es un moderno XD. Me parece increíble que seas capaz de hacer retratos sólo con aguja e hilo, eres toda una artista. Un abrazo
    Rober!

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    Respuestas
    1. Es un arte maravilloso, como todos. Gracias por tu comentario, Roberto.

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