1.- ¿Nos conocemos?

Hi, friend! 
Si estás leyendo esto es porque, de algún modo, te interesa el mundo de la educación. Y para que nos vayamos conociendo hay algunas cosas que quiero explicarte en esta primera entrada.

Me llamo Claudia García y estoy cursando el Máster en Profesor de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanzas de Idiomas. Para ser más clara y concisa, el máster que me empujará un pasito hacia adelante en el camino de conseguir el trabajo de mis sueños: profesora de inglés. ¿Que cómo empezó mi vocación? 

Como la mayoría, fui al colegio de mi pueblo, después al instituto, blabla. Pero lo interesante y el lugar dónde comenzaron realmente mis ganas de compartir conocimientos fue en una academia. Mis padres me apuntaron a esa academia en primero de primaria. Mucha gente se quejaba de la profesora porque decían que eran muy estricta. Pero yo siempre he pensado que su manera de dar clase fue mi fuente de inspiración para elegir mi futura profesión. Al fin y al cabo, todos estamos hechos de los pedacitos que las personas que conocemos a lo largo de nuestra vida van dejando en nosotros, tanto en lo personal como en lo profesional. He tenido muchos profesores y profesoras a lo largo de mi vida. No diré que unos mejores y otros peores, sino con distintos métodos de enseñanza. Por esto, me gustaría seguir aprendiendo a enseñar, para que mis futuros alumnos y alumnas se queden con un pedacito positivo de mi. 

Dejando a un lado mi parte más sentimental, continuo con la historia de mi vocación. En el verano de 2019, verano entre los cursos 2º y 3º de mi carrera de Estudios Ingleses, realicé las prácticas del grado en otra academia de mi pueblo. Durante estas prácticas, estuve a cargo de un grupo de niños de entre 3 y 10 años en un campamento de verano. Me encantó preparar y realizar actividades en inlgés para estos pequeñajos. El siguiente invierno, trabajé en esta misma academia dando clase a grupos de pequeños y adultos. Fue una experiencia muy interesante y abrumadora a la vez. Había dado clases particulares anteriormente, pero no era lo mismo que ponerme delante de un grupo de personas por primera vez. Aunque la experiencia en la academia me había enriquecido como persona y como profesora, tenía claro que cuando terminase la carrera quería seguir los pasos para llegar a ser profesora de inglés en un instituto. Y así es como he llegado hasta este máster y hasta este blog. 

Para terminar, me gustaría explicarte por qué he elegido un nombre tan largo. He estado pensando varias posibilidades; entre ellas un play on words o juego de palabras ingenioso (me encantan los chistes malos y los juegos de palabras). Pero finalmente he decidido escoger una rima, que también me encantan. Y, ¿por qué concretamente Learning together makes everything better? Bueno, claramente el nombre tenía que estar en inglés. Aprendiendo juntos todo es mejor porque todo en compañía se hace más ameno. También porque espero que leyendo mi blog puedas aprender algo nuevo (como ingeniosos play on words...), pero que yo pueda aprender del tuyo de igual manera. Porque enseñar y aprender es un intercambio. Docendo discitur ("enseñando se aprende") nos enseñó una profesora de latín en el instituto. 

Y tú, compañero/a de profesión, alumno/a, amante de la educación en todas sus ramas, ¿qué opinas sobre el importante papel que tenemos dejando un pedacito de nosotros/as en nuestros alumnos y alumnas, como docentes y como personas? Te leo en los comentarios y, ¡hasta la próxima!

See you soon! 


Comentarios

  1. ¡Qué historia tan interesante Claudia! Me parece súper importante ese papel que tenemos como profesores a la hora de dejar huella en nuestros alumnos. Mucho ánimo y espero seguir aprendiendo mucho de tus 'play on words' 😉

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    1. Gracias por tu comentario, Andrea. Trabajaremos para dejar la mejor huella posible en nuestro alumnos/as.

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  2. Esa "bruja" de la Academia era muy estricta, pero con el paso de los años (creo que la mayoría) nos dimos cuenta de lo buena profesora que fue. En parte, gracias a ella me apasioné por el inglés (aunque al final me decanté por el español).

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    1. Así es, Andrea. Habrá gente que siga pensando que era una bruja, pero a mí me cambió la vida.

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